En la búsqueda de un presente que emocione, guste y sea realmente inolvidable, las joyas suelen encontrarse entre los primeros lugares.

Pero, si, además, se quiere sorprender, nada mejor que personalizar con la grabación de una fecha, un nombre o alguna frase especial que signifique algo especial para la pareja o ese ser querido, como puedes hacer con los colgantes.

La personalización de joyas está dirigida a un público muy especial, más exigente, que realmente quiere marcar diferencias con un regalo hacia alguien amado y respetado o para sí mismo.

Con este tipo de detalle se marcan tendencias, se destaca entre la multitud y se mantiene vivo un recuerdo de una forma muy especial. La exclusividad que ofrece una joya personalizada es difícilmente igualable, ya que es un objeto que solo tiene y tendrá un único portador.

Cómo personalizar una joya, por una o por las dos caras

No nos cansamos de repetir que una joya es mucho más que un objeto, aunque se identifique con el lujo y la elegancia, va más allá, pues posee una carga simbólica de difícil comparación con cualquier otro regalo.

Cuando se personaliza, aumenta aún más el valor y su simbolismo, adquiere significado y peso sentimental que sin duda conmoverá a la persona que la reciba. 

Como norma general, se suele grabar un anillo de compromiso, con la fecha, el nombre de la pareja o alguna frase que los representa y los une, en su interior, dejando el exterior impoluto.

Aunque, en relación a los criterios estéticos no hay nada escrito ni prohibido, no es extraño que cada vez más anillos se graben por ambas caras, emulando, quizás, anillos famosos, como el de la película El señor de los anillos. 

En cualquier caso, grabar por el interior y por el exterior es más frecuente en colgantes y pulseras. Los gustos, tendencias y el tipo o modelo de joya ofrecen sus propias excusas y soluciones para ser personalizada y ser del agrado del receptor.

De este modo, las esclavas y los sellos son los más propicios, pues poseen una superficie lisa que los hacen ideales para grabar un mensaje o un dibujo si se prefiere. 

Beneficios al personalizar joyas

Además de belleza y remarcar un mensaje íntimo y exclusivo, llevar a cabo los trabajos de grabado procura otra serie de ventajas que, quizás, no sean del todo conocidas por el gran público. A continuación, se detallan algunas de las más notables. 

La exclusividad 

Merece la pena hacer hincapié de nuevo sobre este valor, aunque se haya mencionado brevemente con anterioridad. La joya personalizada es, posiblemente, el objeto más íntimo e individual que se pueda poseer. Una exclusividad ideal para toda persona que sepa apreciar la originalidad y el detalle, dándole la importancia que se merece. 

La personalidad

Sin lugar a dudas, una pieza que marque diferencias de este modo habla mucho y bien de quien la lleva. Es compañera del modo de vestir, del mismo modo que lo es de pensar, de actuar… En definitiva, refuerza la personalidad, añadiendo carácter y elegancia. 

Un ejemplo de personalizar con el nombre puede ser las pulseras para hombre de Viceroy .

Valor emocional

Es evidente que cuando se regala una pieza de joyería con algún grabado, la persona que la recibe se emocionará al ver cómo has pensado en ella. Sabrá el esfuerzo y el tiempo que se le ha dedicado y que se la conoce en profundidad.

Será una muestra más de lo importante que es el cariño que se le profesa y que se trata de un regalo que va más allá del valor económico, más relacionado con los sentimientos. Será, también, una fórmula perfecta para que se acuerde de esa persona cada vez que se vista con esa la joya, haciendo el vínculo que las une mucho más fuerte. 

Sentido de la pertenencia

Por último, también se debe mencionar que al personalizar la joya se está realizando verdaderamente una toma de posesión en su más amplio sentido. Ya no es solo una cuestión económica, sino que el sentido de pertenencia trasciende hacia algo más íntimo e indisoluble. Se acabaron posibles confusiones, la propiedad estará siempre clara. 

Joyas de tendencia

Por último, se debe destacar que, en estos momentos, las joyas personalizadas se han convertido en toda una tendencia de moda, una opción que tiene una enorme demanda en la actualidad, por lo que, además de todos los motivos hasta ahora señalados, los amantes de la moda sabrán que están cumpliendo con ella en cuanto a este tipo de complementos. 

Ideas para llevar a cabo los grabados

Con bastante seguridad, cada poseedor, futuro propietario o aquel que quiera regalar una joya tendrá muy claro qué es lo que quiere grabar en su superficie para personalizarla y volverla indivisible de la persona agasajada.

Las opciones son inabarcables, existen tantos mensajes posibles como personas, la creatividad y la imaginación tienen aquí una oportunidad de sorprender y agradar.

En cualquier caso, variará según a quién vaya destinada la joya y la relación que se tenga con ella, pues no es lo mismo una novia o una esposa, que una madre o una amante. 

Las frases se referirán al amor, a una promesa por cumplir, una frase que signifique algo único para ambos, una simple palabra inspiradora… Habituales son las fechas, ya sea cuando se conocieron por primera vez, cuando se prometieron amor eterno, la llegada de un hijo…

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también se suele recurrir a algún sencillo dibujo representativo, ya sea místico o religioso, mitológico o ecológico, símbolos ancestrales, signos del zodiaco, un corazón e incluso fórmulas matemáticas. 

En realidad, las ideas no se agotan nunca. El diseño, el grabado final, está sujeto a un sinfín de opciones y posibilidades, aunque debe predominar aquella que haya servido de algún modo para establecer una unión, sentimental o personal, entre ambos, quien ofrece el regalo y quien lo recibe.  

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En definitiva, al personalizar las joyas se consigue que estas se vuelvan más especiales, más auténticas, añadiéndole originalidad y sensaciones, y facilitando la conexión entre las personas, entre la agasajada y aquella que ha llevado a cabo la labor de regalar un objeto único y exclusivo.